Una despensa desorganizada no es útil. Además de dificultar la tarea de encontrar el alimento que queremos, muchas veces los productos se estropean al quedar olvidados en el fondo del armario o tras una garrafa de agua.

1.- Mentalización - ¡Imagínese entrar en su despensa impecable y encontrar todo lo que necesita para cocinar gustosamente y sin estrés!

2.- Limpiar y ordenar :

• Vacíe la despensa, limpie los estantes y decórela a su gusto.


• Organice el espacio por áreas e identifíquelas con etiquetas: "conservas", "especias", "pasteles",...


• Verifique la caducidad de los artículos y resalte la fecha de un rotulador fluorescente. 

3.- Mantenimiento: 

• Ordene los productos por categorías, situando los que están a punto de caducar en el frente. 


• Almacene alimentos en recipientes herméticos (indicando el nombre de la fecha de caducidad) o use pinzas aptas para alimentos para cerrar paquetes. 


• Sitúe a la altura de los ojos los alimentos que usa con más frecuencia y deje los estantes inferiores para los productos más pesados. 


• Guarde alimentos como patatas, cebollas y ajos en cestos aireados. 

El tiempo que acaba de invertir en la organización de su casa repercutirá a su favor, traduciéndose en más horas libres, una mayor tranquilidad y más racionalización de los gastos.